El temple de tu ánimo tiene que forjártelo Tú mismo...
tienes que ir haciéndotelo
día tras día, pieza por pieza
como una armadura brillante y sólida.
De ti, sólo depende de ti,
y de las ambiciones que alimentes,
de los pensamientos que albergues,
de los ideales que te propongas.
De: Winfred Rhoades
Editorial San Pablo
Fotografía:Silvia Cristina
4 comentarios:
Y al final...como artesanos, contemplaremos el fruto de nuestros afanes con profundo orgullo y callada reverencia...
Paz,
Isaac
Es una realidad!
TODO! depende de nosotros y nuestra actitud.
Gracias por tus enseñanzas y por recordarnos cosas tan elementales como estas.
Te bendigo hoy...
Paz,
Isaac
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