Le pedí fuerzas a Dios para llegar más lejos,
y me hizo débil para que aprendiera la humilde obediencia.
Le pedí salud para hacer cosas grandiosas, y me hizo frágil
para que hiciera cosas mejores.
Le pedí riquezas para ser feliz,y me dio la pobreza para que fuera sabio.
Le pedí poder para ser admirado por los hombres,
y me dio debilidad para que sintiera la necesidad de Dios.
Le pedí todas las cosas para disfrutarla vida y me dio vida
para disfrutar todas las cosas.
No tuve nada de lo que pedí,pero todo lo que esperaba,
casi a pesar de mí mismo, mis silenciosas plegarias fueron escuchadas.
Soy el más rico en bendiciones entre todos los hombres.
4 comentarios:
Por eso, es mejor no podir nada y ser en cambio agradecido por los dones recibidos.
Besos y Feliz Otoño,
María Cristina
Felices Pascuas, También.
¡Me alegró verte por casa!
Bellisima plegaria.. dios siempre presente en todo y ante todo, él es la totalidad... un abrazo
Sí que hace tiempo que no nos vemos. Me ha alegrado mucho tu visita. Y decirte que esta oración expresa muchas cosas del corazón del ser humano. Gracias por ella!
Besos
Felicitaciones por este blog tan lleno de buenas intenciones.
Muchos saludos.
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